lunes, 20 de octubre de 2014

Muñeca rusa

Mis engranajes han ido parando, no quedaba nadie que pudiera rociarlos de aceite. Mis extremidades leprosas se han desprendido, ya no me pertenecen. Estos ojos, que un día me sirvieron para ver los amaneceres, hoy no me muestran más que telarañas y obstáculos. Sujeto mi última y más preciada pertenencia en un puño, para que nadie consiga arrebatármela del pecho.

Soy una muñeca rota, un juguete que ha pasado de muchas manos y que nadie ha tratado con la suficiente delicadeza. Tengo cicatrices donde debería haber sonrisas y caricias, pero sigo viva, por muy suave que lata mi dolido corazón. 

En esta obscura y cavernaria ruta, sin embargo, he encontrado unas manos dispuestas a recomponerme.  Unas manos amigas, que mediante sus remiendos están consiguiendo volver a juntar todas las piezas que he ido perdiendo durante muchos largos años. Al igual que Gepeto, mi familia está tallándome, con la única e importante diferencia de que nunca seré de madera. Han ido barriendo y recogiendo los restos que me caían, y todo sin que me diera cuenta, haciendo acopio de una destreza que los mismísimos ninjas desearían tener. 

No soy más que la primera pieza de una muñeca rusa, endeble y minúscula; pero a pesar de todo, sé que tengo en quien apoyarme. Solo necesito tiempo para poder forjar un fuerte armazón y evolucionar hasta que la matrioska que he empezado a formar sea lo suficientemente grande como para valerse por sí misma y devolver el bastón a quien lo pueda necesitar.


jueves, 16 de octubre de 2014

No juzgues

"No juzgues
todo lo que desconoces.
No te rías
de los que no son veloces.
Pero sobre todo,
no subestimes
el gran poder de otras voces." 

Las flechas vuelan a una velocidad abismal. Puede que tú seas uno de los objetivos, cualquiera puede querer herirte. La mitad de la sociedad contra la otra mitad, ¿parece justo, verdad? Cada uno libra sus propias batallas, armado de valor y de una pizca de egoísmo. Con el carcaj lleno y el arco preparado, disparamos a todas las direcciones, para alcanzar así, el mayor número de afectados posible. Acechamos al mismo tiempo en el que somos acechados, intercambiando a menudo el rol entre el cazador y la presa. 
Los vocablos que salen de nuestras gargantas son los causantes de esas profundas heridas. Los disparamos cual flechas ardientes y dañan en lo más hondo de cada ser; palabras que hieren, perforan y se adentran en nuestra conciencia, añadiendo más sufrimiento a nuestra ya mísera existencia. 

A pesar de ello, quiero que mi carcaj solo contenga flechas de flores, sonrisas o alegría, para que de ese modo, rompa ese juego de rol de una vez por todas y trace mi propio camino. Soy una voz minúscula en una gran sociedad, pero estoy segura de que habrá muchas personas que intenten liberarse de esas cadenas y dejar de ser juzgadas. Todas las pequeñas voces formaremos un gran equipo que vencerá tanto a los prejuicios como a los patrones trazados por un puñado de gente. Porque, a fin de cuentas, uno a uno somos insignificantes, pero juntos somos inmortales. 

Cuatro estaciones

El suave movimiento de las hojas que cuelgan de un árbol se ve interrumpido por una racha de viento que lleva por delante unas cuantas ramas. Una vez despojadas de su hogar, las pobres hojas se ven indefensas ante un mundo feroz que desea con ansia que se marchiten. Son arrastradas de un sitio hacia otro, reduciendo poco a poco el pequeño grupo al que pertenecen. Según van cambiando de tonalidad, pasando de un verde oscuro a un marrón claro, notan como la vida se les escapa, pero no tienen donde agarrarse para mantener su último aliento. Ha llegado el otoño, y con él el fin de muchas hojas. La naturaleza sigue su curso, y así lo debemos hacer nosotros también. 

Al igual que la mayoría de las plantas se marchitan cuando hace frío, el ser humano suele abrir su corazón para estar acompañado durante los meses más gélidos. El invierno evoca a la soledad, y los que pretenden escaparse de las garras de ésta, no tienen más remedio que compartirla con otra persona. Por muy irónico que parezca, la soledad se comparte, ya que es casi imposible aislarse y rechazar cualquier contacto. Nunca se está solo del todo, simplemente nos tapamos los ojos con un vendaje imaginario para no poder mirar a nuestro alrededor. 

Pero ya es hora de que saltemos ese obstáculo que nos delimita en nuestro día a día. La primavera se acerca, y con ella, la fuerza para resurgir cual ave fénix. Las flores vuelven a cobrar vida, el ambiente se vitaliza y con ello nosotros también. Libres de cualquier cadena, se nos brinda la oportunidad de alcanzar el cénit y demostrar que somos más de lo que hemos demostrado los meses anteriores. Libres, revitalizados y con ganas de dar un gran salto hacia adelante, afrontaremos el verano. La fortaleza acumulada durante el resto de las estaciones se apoderará de nuestro cuerpo y nos impulsará en los futuros proyectos. 

Son cuatro las estaciones que tiene el año, pero son cientos los sentimientos que vivimos en ellas. Muchos de ellos no son muy bienvenidos, pero he ahí la gracia de la diversidad: cuantas más sensaciones percibamos, más enriquecedora será nuestra existencia. Se dice que la vida es la mejor maestra ya que cada experiencia nos ayuda a establecer los cimientos de un ser al que aspiramos llegar. 

La bienvenida

Miles de palabras fluyen en mi mente, pero mi boca no consigue reproducir ningún sonido, parece que pensamiento y voz trabajan por separado. Quiero romper este silencio atronador, para que, de alguna manera u otra, mis divagaciones no queden amontonadas como si fueran meros libros olvidados en las estanterías de una biblioteca.

Ya que mis cuerdas vocales no siguen las órdenes o indicaciones correspondientes, no me queda más remedio que emplear un ordenador y este blog recién creado para expresar mis sentimientos, temores e incluso alguna que otra anécdota que encuentre graciosa. Mediante unas grafías negras y una hoja en blanco, intentaré que la hija de la ira que llevo dentro quede atrás y se eche a volar, convirtiéndose así en una bella mariposa que no tiene miedo a enfrentarse a su cruel entorno. Entre versos y prosa, abriré el camino hacia un futuro cuyo principal objetivo será alejarse de los errores del pasado y sanar las profundas heridas de las que todavía emana sangre. 

Así que, ladies and gentlemen, pasad y disfrutad del espectáculo donde podréis seguir paso a paso la metamorfosis de una chica apodada Daughter Of Rage.